- mode_comment
La primera ministra británica, Theresa May, saltó este martes al continente buscando la salida que necesita para salvar el acuerdo de divorcio que cerró con la Unión Europea. Sin embargo, la Unión insistió en que no renegociará tal y como piden los euroescépticos de su partido Conservador para aprobar la salida ordenada en su Parlamento. May se va quedando sin opciones en casa, y sus colegas europeos no están dispuestos a ofrecerle el salvavidas que busca en la cumbre europea del jueves y el viernes. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, le volvió a repetir que las 585 páginas del texto del divorcio ratificadas por los líderes europeos el pasado mes son el "mejor acuerdo, y el único posible".